Secciones
Destacamos
Alberto Estella
Miércoles, 9 de enero 2019, 12:46
Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
A Javier Galán, jubilosamenteEste año se celebran varios centenarios de hombres ilustres. ¿Y qué oficios tenían? De los tres que cumplen los 400 años, Shakespeare fue poeta, dramaturgo y actor; Cervantes, soldado, escritor, comisario de abastos y recaudador de contribuciones; y Garcilaso poeta y militar. ¿Solamente? Eso no es nada comparado con nuestro paisano Torres Villarroel, que además de escritor, médico, sacerdote y profeta, escribió: "salí gran danzante, buen toreador, mediano músico y refinado y atrevido truhán". Pero a su vez el salmantino, y todos los que ustedes me puedan citar, son superados cumplidamente en quehaceres o aficiones por un gallego que nació hoy hace exactamente cien años: "pintor, guionista, actor, filólogo, caminante, torero, geógrafo, periodista, senador, gastrónomo, erudito, cartero honorario, profesor y académico", según relación pormenorizada de su único hijo. Pero seguramente olvida, o no quiere recordar que, además „y algunos oficios se quedarán en el tintero„, fue erotómano, proctólogo aficionado (sorbía una palangana de agua por retambufa), poeta, caballero y villano, censor, putañero, inventor de palabras, algún cabrito dice que confidente policial, vagabundo, provocador y coplero (pudo pensar en el agitador de la peor memoria histórica cuando escribió: "La paloma de la paz / acabó asada en el plato / sabroso pero barato / de un político voraz").Lea el artículo completo en la edición impresa de LA GACETA
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.