Los salmantinos se unen en una nueva batida para buscar pistas sobre el paradero de José Antonio Martínez

En un nuevo intento para localizar alguna pista del paradero de José Antonio Martínez Bolos, el vecino de Garrido norte enfermo de Alzheimer que desapareció en el centro de la ciudad hace más de 15 días. Sus familiares y amigos se han reunido este sábado en el verraco de piedra del Puente Romano ataviados con chalecos reflectantes.A principios de esta ya hubo otra batida de las numerosas que se han realizado para intentar localizarlo, los familiares acompañados por numeroso voluntarios se reunieron el pasado martes en la iglesia nueva del Arrabal y en la que revisaron principalmente la zona de Aldeatejada y El Zurguén. Al igual que estos, profesionales también trabajan a diario sin descanso para tratar de dar con su paradero.En una entrevista de Manuel, portavoz de la familia, concedida a LA GACETA el pasado martes afirmaba que están empleando todos sus esfuerzos para localizarlo cuanto antes. La situación es muy angustiosa". Al mismo tiempo que agradece la colaboración ciudadana.Sin embargo, la familia en días pasados amplió su búsqueda a la provincia salmantina a través de la pegada de carteles en municipios como Peñaranda y Vitigudino. Además de Huerta Otea y Salas Bajas, otro de los lugares en los que se intenta conseguir algún rastro para dar con su paradero es el centro de la ciudad, donde desapareció o en el recorrido que hacía todos los días durante su paseo.En días pasados, la Policía Nacional comprobó las cámaras conforme al protocolo y según afirma un familiar, en una grabación de la calle Toro se le ve caminando solo el día de su desaparición. A partir de ahí su pista se pierde y conforme pasan las horas las esperanzas de encontrarle a salvo se desvanecen y la búsqueda se hace más angustiosa. Alerta por meningitis en Salamanca al detectarse un caso en una niña de 2 años 549.000 euros para financiar 17 investigaciones de envejecimiento en Salamanca Nuevos aseos públicos autolavables, accesibles y automáticos en los parques de la ciudad