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Aumentan los perros de razas peligrosas pese a los ataques y la mayor tramitación

Hay registrados 1.682 cánidos en Salamanca, cuando en 2017 eran 1.597

M.D. | B.F.O.

Miércoles, 16 de mayo 2018, 21:04

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A pesar de que periódicamente aparecen en los medios de comunicación noticias de ataques a personas por parte de perros, generalmente de razas potencialmente peligrosas, -el último este martes, cuando un niño de tres años fue ingresado por las mordeduras de un pitbull en Almería-, el número de este tipo de cánidos en Salamanca ha continuado aumentando. Ni siquiera la mayor tramitación que han de realizar los dueños para obtener la perceptiva licencia, y que incluye certificados médicos y psicológicos, está suponiendo un freno a que cada vez haya más perros de estas características. Su aspecto físico y carácter les han granjeado la admiración de muchos salmantinos, en especial de los más jóvenes, según apuntan los veterinarios.Los datos aportados por la Junta muestran la tendencia al alza de los perros que, por ley, tienen la consideración de ser potencialmente peligrosos. El Gobierno regional contabiliza en la actualidad 1.682 cánidos de estas características, lo que representa un incremento de 85 en comparación con un año antes, cuando había 1.597. Hay que recordar que la información de la que dispone la Junta es la que le pasan los ayuntamientos de Salamanca, ya que son ellos los que llevan el registro de estos perros, trámite obligatorio para los dueños.El aumento denota que los salmantinos siguen mostrando un gran interés en estas razas o en los perros que cumplen con unas características físicas y de carácter por las que pueden ser considerados como potencialmente peligrosos. El presidente del Colegio de Veterinarios de Salamanca, Antonio Rubio, aclara que la afición se da sobre todo entre las nuevas generaciones. "El problema es que hay gente que, al ver un perro de este tipo, se asusta, sobre todo mayores", señala.La tenencia de estos animales está envuelta en una constante polémica, ya que de vez en cuando salen a la luz pública ataques a personas protagonizados por estos cánidos, como el de este martes en Almería. De hecho, hace poco más de un año, a finales de marzo, en la provincia falleció un vecino de Santa Marta tras ser atacado por varios de estos perros que ni siquiera estaban registrados. Por este suceso, la Fiscalía pide para el propietario cuatro años de prisión por un delito de homicidio imprudente al dejar la puerta abierta de la finca y sin atar a los animales, y tres para el veterinario por falsear la cartilla y no hacer constar que se trataba de perros potencialmente peligrosos. Tampoco arredra a los dueños la abundante tramitación que han de realizar para conseguir la licencia. Están obligados a contar con seguro y a pasar un control psicotécnico que documente que tienen la aptitud física y psicológico para manejar a un animal de este tipo.Lea el artículo completo en la edición impresa de LA GACETA en Orbyt y Kiosko y más

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