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Mario García Romo se ha metido en la élite del atletismo al colgarse la medalla de bronce en la final del 1.500 en el Campeonato de Europa de Múnich. El salmantino se mostró muy fresco en una carrera en la que finalizó por detrás del dominador Jakob Ingebrigtsen, ganador, y de Jake Heyward.
El de Villar de Gallimazo desde el inicio se colocó detrás del gran favorito Ingebrigtsen y aguantó casi toda la carrera a su estela, pero en los metros finales el británico Heyward le alcanzó. No le pudo la presión a Mario García Romo que supo amarrar un bronce para la historia.
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