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A Carlos de la Nava (31 años) el esguince de tobillo que sufrió el pasado 13 de octubre ante el CD Lugo en el Reina Sofía le frenó en seco. Al '10' salmantino le ha costado retomar la marcha: se perdió tres partidos —dos de Liga y el de Copa—, jugó 24 minutos en la goleada al Real Unión, 22 en el empate en Tajonar y volvió a recuperar la titularidad, cinco partidos después, está última jornada de Liga, aunque no llegó a completar el encuentro frente al Zamora CF en el Reina Sofía. «Se veía en el momento y también con el tiempo: me vino en mal momento y no porque estuviera mejor o peor, sino porque es al principio de temporada. Pero, bueno, son gajes del oficio», asegura el pichichi blanquinegro, que antes de la lesión ya sumaba un hat-trick de tantos.
«Creo que esta jornada ya voy a poder volver a estar al cien por cien. Me ha costado, más que nada porque estaba con confianza, estaba metiendo goles y eso hace que te sientas importante», afirma De la Nava, que pone en contexto su papel de este curso en el total de temporadas en el club ahora del Reina Sofía: «No sé si este está siendo mi mejor nivel como jugador de Unionistas, lo que sí sé es que en mi último año aquí en cuanto a goles no fue bueno. Y eso hizo que tuviera una presión que nunca había tenido ni sentido porque no he sido un delantero de hacer goles sino otras cosas. Estos tres tantos que he metido ahora, de verdad que me han ayudado a nivel personal, ojalá se den muchos más, pero ya no por mí sino por ayudar al equipo. Aunque sé que en otros aspectos también lo hacía y lo tengo que seguir haciendo», se confiesa el segundo capitán de Llácer.
Esta relación con el gol viene propiciada por un Unionistas distinto al último que se encontró, entre otras cosas: «Creo que somos un equipo que juega más desde abajo que en otras temporadas, también que generamos más... Nos hemos acoplado rápido a los que nos pide Llácer. Quizá el debe del inicio de temporada había estado en la parcela defensiva y veo que hemos dado un paso adelante, ahora a los rivales les cuesta mucho más hacernos ocasiones y goles», pasa revista al estado de forma de una plantilla con la que está pasándoselo «mejor que nunca»: «Estoy disfrutando muchísimo. Creo que en la mayoría de los partidos hemos sido dominadores. Sinceramente creo que tenemos menos puntos de los que merecemos... Pero no podemos quedarnos en eso ni conformamos con eso», dice De la Nava, que sale al paso de las críticas que últimamente está recibiendo su equipo precisamente por el juego: «De fútbol sabe y opina todo el mundo... En redes la gente puede escribir cualquier cosa, aunque luego, en persona, te dice que está contenta con el equipo y con el juego. A mí esto me lo transmite gente que es fiel desde hace muchos años, que estaban ya antes de que llegara yo (verano del 2017)».
Estas críticas abren paso a uno de los debates de la temporada en el club: ¿Cuál debe ser la exigencia? «Sinceramente creo que está más alta que nunca, que es mayor a lo que yo había vivido antes. En los primeros años en Primera Federación siempre salimos a salvarnos y ahora se ha dado un paso más. Pero ese paso se tiene que dar jornada a jornada hasta sumar 38, queda mucho trabajo por hacer».
La siguiente parada es la 14 de la temporada, en Andorra: «Cuando un equipo baja del fútbol profesional se nota en todo. Para mí, por bloque es el candidato número uno al ascenso directo. Va a ser un partido súper complicado, pero a la vez igualado», asegura el que también fue jugador de Piqué (presidente del club andorrano) en la Kings League: «No le llegue a ver, pero me hablaron de él como un personaje al que le molaba ese formato que ha inventado».
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