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El poco parecido que existe entre los mexicanos Carlos Slim y Lovato

El poco parecido que existe entre los mexicanos Carlos Slim y Lovato

El dueño del Oviedo ha puesto a los carbayones en Segunda, mientras que el propietario del Salamanca acumula campañas de decepciones

Martes, 22 de septiembre 2020, 18:35

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El Oviedo y el Salamanca tienen a un inversor mexicano detrás, pero aunque pudieran tener más similitudes lo único que tienen en común Carlos Slim, dueño del Oviedo, y Manuel Lovato, propietario del Salamanca, es su nacionalidad mexicana. El resto es como la noche y el día.

En noviembre de 2012 Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo según la lista Forbes (Manuel Lovato no aparece), se hizo con el Oviedo salvándolo de la ruina a través del grupo CARSO, de su propiedad. A raíz de aquel salvavidas, CARSO ha invertido 17,1 millones de euros en el Oviedo además de conseguir 5 millones de euros más de inversores cercanos al empresario mexicano. Su última ampliación de capital, la séptima desde que CARSO llegó al Oviedo, dejará casi 1,5 millones de euros en el club para esquivar los problemas del COVID19. En Oviedo están encantados con CARSO y es que los únicos problemas que tienen son los deportivos, que entre o no el balón, y normalmente entra. En dos años y medio, y con el argentino Sergio Egea en el banquillo consiguieron el ascenso a Segunda y ahora suman cinco temporadas en el escalón de plata del fútbol español.

El camino de Lovato en lo deportivo es de Provincial a Segunda B en tres temporadas y dos campañas decepcionantes en Segunda B donde se hicieron proyectos para estar arriba y después el objetivo fue eludir el descenso. Lovato puso en 2015 un millón de euros para hacerse con el Helmántico (aunque también tiene la mitad de esa propiedad la familia Iglesias) y pagó 150.000 euros por los símbolos de la UDS. Del resto de dinero se sabe más bien poco entre otras cosas debido a que la conversión del club en Sociedad Anónima Deportiva (SAD) la ha paralizado. Prometió en junio de 2018 en el césped de San Lázaro tras ascender a Segunda B que llegaría la SAD pero se ha quedado en nada.

Desde entonces, con Lovato desde México (lleva un año sin pisar Salamanca), proyectos deportivos que se desplomaron en octubre, arrastrando deudas hasta que las ‘salva’ o aplaza en junio y un mar de polémicas. El curso pasado con 1,6 millones de presupuesto Lovato solo aparece en aportaciones con 180.000 euros (es lo que presentó al Ayuntamiento para pedir la subvención). Normal, que muchos en Salamanca sientan envidia sana del Oviedo y es que su ‘Lovato’ sí cumple.

En realidad, el único punto en común es que ambos han contratado en algún momento a un entrenador: Sergio Egea.

El Oviedo de Sergio Egea en la 2014-2015 consiguió el ascenso a Segunda, algo que el club asturiano llevaba 12 años esperando, pero lo hizo con uno de los presupuestos más altos de la categoría y con una nómina de jugadores contrastados en Segunda División. En esta ocasión Egea en el Salamanca no cuenta con un presupuesto tan elevado y repetir los números de aquella temporada mágica en Oviedo se presume complicado. La solidez de aquel Oviedo de Egea sirvió para salir campeón varias jornadas antes del final y acabar con 80 puntos, ocho más que el segundo clasificado, y después subir en una dramática eliminatoria ante el Cádiz.

Ahora, Sergio Egea vuelve a dirigir un equipo en Segunda B con dueño mexicano pero no tiene ni el presupuesto ni el cartel de favorito al ascenso a Segunda como tenía entonces.

Slim compró el Oviedo tras una broma radiofónica

El mexicano Carlos Slim no tenía ningún vínculo directo con el Oviedo. En 2012, imitadores en la Cope llamaron a Arturo Elías Ayub, mano derecha de Carlos Slim, además de yerno suyo, haciéndose pasar por Emilio Butragueño para comentarle la difícil situación que está atravesando el Oviedo. Tras la broma se aceleró el proceso de compra y el Oviedo acabó salvándose.

Lovato fue a comprar el Zaragoza y acabó en Salamanca

Michel Criado, exdelegado de la UDS, a través de Luis Emilio Fernández, cónsul honorario de México en Zaragoza, puso en contacto a Manuel Lovato con los responsables del Salmantino en 2015. Lovato había intentando comprar sin éxito el Zaragoza y acabó adquiriendo el Helmántico.

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