Alfredo Martín-Cubas: «El número de jinetes y caballos inscritos para esta edición es increíble y todo un reto»

El Campo de Tiro y Deportes acoge desde este viernes, y hasta el domingo, la 73 edición del Concurso Nacional Hípico de saltos de obstáculos. Una cita obligada dentro del programa de Ferias y Fiestas que esta temporada trae como gran novedad la apuesta por la cantera con la celebración de una jornada de la Liga nacional de ponis.

La nueva edición del Concurso llega con más caballos que nunca. Si la pasada edición fue la de la recuperación, esta se puede decir ya que es la de la consolidación, ¿no?

—La pandemia para nosotros fue un mazazo enorme. La suspensión del Concurso durante dos años provocó que a su vuelta el número de participantes descendiera sustancialmente, que fue algo que nos chocó muchísimo. Sobre todo, porque en contraposición el número de aficionados creció exponencialmente con respecto a las ediciones anteriores a la pandemia. En la pasada edición crecimos en participación y volvimos a los niveles de siempre y en esta ocasión, en este 73 concurso, la respuesta se puede decir que es masiva no solo de caballos sino también de jinetes. Lo de este año es increíble. Y viene dado, sobre todo, porque el Concurso acogerá dos competiciones, el torneo cuatro estrellas que organizamos y una jornada de la Liga nacional de ponis —caballos de menos de 1,48 metros de altura desde la cruz—, que se suma a la oferta durante la jornada matinal. Esta incorporación atiende a la petición hecha durante las últimas ediciones de los jinetes profesionales de poder incorporar a este Concurso a sus alumnos. Para nosotros es todo un reto. Esperamos estar a la altura.

Escuchar al jinete reforzará la grandísima impresión que el circuito tiene sobre el concurso de Salamanca, ¿verdad?

—El respeto que existe de todo el mundo hacia el Concurso es máximo. Sin eso, muchos de los jinetes que van a participar no se inscribirían. Además, siempre es un plus la gran cantidad de gente que viene, que supera las 10.000 personas, es conocedora y valora su labor dentro de la pista; y eso hace que año tras año hayan consolidado una frase de los profesionales, que es que Concursos como el de Salamanca, en el resto de España, ninguno.

¿La apuesta por la cantera es lo que le faltaba al Concurso para acabar de ser redondo?

—Este tema para nosotros es muy importante; la cantera es algo que tenemos que cuidar. Sobre todo, porque da la oportunidad al futuro de este mundo de poder competir; no sólo vamos a tener jinetes en este concurso (que se celebrará por las mañanas con acceso gratuito al recinto) de Salamanca, sino de Zamora, otros puntos de Castilla y León y de España. Junto con la Federación decidimos que, después de habérnoslo reclamado los jinetes, celebrar aquí la jornada de esta Liga y si sale bien, desde luego, estamos comprometidos a seguir acogiendo esta competición, que es independiente del Concurso.

Al margen de la Liga de ponis, ¿qué novedades trae a mayores el 73º Concurso?

—Irá en relación con la grandísima asistencia de público que tenemos año tras año. En este sentido, nos gustaría de disponer de más espacio en las instalaciones del Campo de Tiro y Deportes y dar cabida a más gente a un espectáculo que durante cuatro horas es capaz de acoger a familias al completo disfrutando del mundo del caballo. En este sentido, estamos intentando habilitar una grada en el fondo de la pista; sabemos que no dispone de sombras, pero las temperaturas se prevén agradables y sin riesgo de lluvias.