La subida sin previo aviso del precio del autobús metropolitano indigna a usuarios y ayuntamientos

La subida de las tarifas en el transporte metropolitano de Salamanca ha vuelto a levantar el malestar y las quejas de los ayuntamientos de las grandes localidades afectadas.La principal protesta en la que inciden los responsables municipales es la falta de comunicación previa por parte de la Junta de Castilla y León sobre esta medida que, aunque mantienen que no es elevada, sí debería haber avisado de su aplicación, ya que en la mayoría de los casos se han enterado por la circular enviada por la empresa y el listado de los nuevos precios en los vehículos, y en otros municipios, como es el caso de Santa Marta de Tormes, han sido los propios usuarios los que han trasladado sus protestas al Consistorio.Asimismo, insisten en que esta subida correspondiente al aumento del IPC "no se ha aprobado en ningún Consejo Rector de esta legislatura". En este sentido, desde la Consejería de Fomento de la Junta aseguran que esta medida "se adoptó en un Consejo Rector anterior y desde 2015 no se había actualizado y ahora lo que se aplica es la subida correspondiente al IPC de 2017". Respuesta ante la cual, los alcaldes mantienen su postura de que la Junta "debería haberlo recordado, precisamente porque muchos no estábamos en el Gobierno antes de 2015 y en las reuniones celebradas estos años no se ha tratado subir los precios".Por otra parte, las protestas de los consistorios y usuarios afectados no se centran sólo en la subida de las tarifas, sino que no entienden por qué sólo se ha incrementado el precio de los billetes y bonos bonificados y no del billete ordinario, "castigando aún más a los usuarios habituales que utilizan a diario el transporte público".