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De pie y de rojo, un socorrista vigilando una de las piscinas de Garrido. ARCHIVO
Más socorristas en las piscinas dependiendo del número de usuarios

Más socorristas en las piscinas dependiendo del número de usuarios

Las piscinas naturales también deberían regularse, así como establecer zonas prohibidas

M.D

Domingo, 18 de agosto 2019, 22:05

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El procurador del Común ha pedido a la Junta una actualización de la normativa en materias de piscinas para introducir nuevos criterios de gestión, ya que la vigente, que data de 1992, está anticuada. Una de las primeras exigencias que hace el organismo consiste en cambiar la referencia para fijar el número de vigilantes obligatorios en las piscinas, ya que considera que los actuales resultan insuficientes para garantizar la seguridad en las piscinas con más usuarios. También aconseja incluir en la nueva norma la regulación de las piscinas naturales e incluso establecer zonas prohibidas. Señala que de esta forma el Gobierno regional contribuiría a reducir el número de muertes por ahogamiento en la Comunidad, uno de los más altos en las regiones de interior de España.

El principal requerimiento del procurador del Común tiene que ver con el número de vigilantes. La legislación actual fija como referencia el número de metros cuadrados de la piscina para fijar el mínimo de socorristas, un criterio que el procurador demanda modificar para que se tome como referencia el número de usuarios del recinto o, al menos, que se reduzcan los metros cuadrados por vigilante. De esta forma, asegura, se cumplirían mejor las indicaciones del IV Plan de Salud de Castilla y León. Un mayor número de socorristas permitirá, entre otras cuestiones, impedir que en los vasos se introduzcan elementos peligrosos, como algunos hinchables, una práctica que denuncia el procurador.

El informe del procurador también recoge la necesidad de que la Junta valore la inclusión en la futura normativa de las piscinas naturales en las que se efectúa el control sanitario de la calidad del agua de baño. Señala que en estas instalaciones se debe exigir que haya un servicio de salvamento y socorrismo adaptado a las características especiales de los recintos. Una de las tareas de los socorristas será la de señalizar y balizar la playa o zona de baño si fuera necesario, además de establecer un punto de primeros auxilios. También considera necesario elaborar un catálogo de zonas prohibidas.

Para sustentar sus argumentos, el procurador apunta que el 63% de los ahogamientos suceden en espacios sin socorristas y que cuanto mayor es el número de usuarios, más casos de ahogados ocurren.

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