Un ganadero de Lagunilla investigado por la Junta movía reses muertas a una finca municipal

En principio, y según fuentes de la Junta, una vez inspeccionada la explotación a los veterinarios oficiales les ha llamado la atención la delgadez de algunos animales y también el alto porcentaje de bajas, porque han sido en torno a 15 de unos 40 animales en un periodo corto de tiempo.

Según las mismas fuentes, el ganadero comunicó que había avisado al veterinario por la presencia de parásitos en las reses y ahora la investigación se centra en saber si ésta fue la causa de la muerte o influyó una alimentación insuficiente de los animales.

Sí ha constado la Junta que el ganadero transportó cadáveres de reses a otra finca, de propiedad municipal, utilizada por el resto de vecinos como embarcadero.

Según expuso el ganadero, de unos 80 años, esta práctica que no está permitida la llevó a cabo para facilitar el acceso del camión de recogida a los cadáveres de los animales.