Salamanca no es lugar de manadas de lobos: entran por Zamora, Ávila y Portugal

El último censo del lobo, ya en la última fase, y elaborado con el objetivo de que el Gobierno traslade a la Comisión Europea los datos reales sobre su población, apunta a un incremento de manadas y con la curiosidad de que Salamanca sigue siendo, en cierto modo, una isla pese a su potencial ganadero.

Según ha podido saber este periódico, en relación al censo anterior sí han aparecido manadas en zonas habituales de lobo, como la Sierra de la Culebra o Picos de Europa, incluso en Tierra de Campos. Sin embargo, en Salamanca las manadas no terminan de asentarse de forma estable y criar, aunque es una provincia donde siempre suele haber daños. El estudio apunta a que los lobos que atacan al ganado en Salamanca son, por lo general, procedentes de Zamora, Portugal o Ávila. En la Junta de Castilla y León siempre había sido una preocupación que manadas se asentaran en esta provincia, la de mayor densidad de ganado extensivo de España y por las dehesa, pero no lo han hecho y, en cambio, en Ávila, con también un alto número de cabezas de ganado, los daños se han disparado.El censo nuevo está previsto que sea presentado este próximo mes.

Según el censo regional 2012-2013 en Castilla y León había 179 manadas (grupos familiares de lobos) de las 297 de España (censo nacional 2012-2014). El censo se realiza cada 10 años y luego hay postcensos, con manadas nuevas inventariadas entre 2014 y 2018. En el estudio publicado en 2018 «Lobos. Población de Castilla y León. Situación en España», el investigador Mario Sáenz de Buruaga se refirió a 5 manadas en Salamanca y una más en la frontera con Portugal. Y en cuanto a presencia, que no manadas, se había incrementado de forma notable.

En el censo regional de 2012-2013 se determinó que Salamanca era área de campeo potencial de 5-6 manadas de las 179 regionales y las situaba en San Felices de los Gallegos-Villar de la Yegua; Valdelosa-Zamayón; Tardáguila-Aldeanueva de Figueroa; entre Torrecilla de la Orden (Valladolid) y Tarazona de Guareña; y entre El Madera, en Zamora, y Topas. Luego se detectaron abundantes indicios de la especie en El Payo (a 50 kilómetros de la manada detectada en Vitigudino); y también en Saldeana, a 27 kilómetros al norte de esa manada. En el censo anterior 2000-2001 se había determinado la presencia de 2 manadas en la provincia de Salamanca.

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