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Cuadrilla de temporeros sacando patatas en Cantalpino. TRISOL
Así cuida Salamanca de los temporeros que cada verano trabajan en sus campos

Así cuida Salamanca de los temporeros que cada verano trabajan en sus campos

La Diputación cuenta con un dispositivo para atender sus necesidades y evitar los asentamientos al aire libre

Jueves, 8 de agosto 2019, 20:42

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En 1995, coincidiendo con la llegada de un gran número de temporeros de la patata a la comarca de Las Villas, el norte de Salamanca y Peñaranda, las instituciones se encontraron con el problema de atender las necesidades sociales que la mayoría de ellos, y también sus familias, presentaban mientras trabajaban en los campos de la zona.

El regreso de estas cuadrillas durante los siguientes veranos enquistó el problema, lo que llevó a la Diputación a crear en 2012 un dispositivo de atención social, en colaboración con Cruz Roja y Cáritas, con el objetivo de “normalizar” su situación mejorando sus condiciones de vida y atendiendo sus necesidades.

Desde entonces, como asegura Eva Picado, diputada de Bienestar Social, la situación ha cambiado radicalmente. “Cada vez vienen menos temporeros y están mejor atendidos porque normalmente se trata de las mismas familias que regresan y además saben que cuentan con recursos para atender sus necesidades”, explica.

Lejos de los habituales campamentos que muchos de estos temporeros montaban en pleno monte, lo habitual es que hoy vivan en las casas alquiladas. Aunque cada año les resulte más díficil, como reconocen los alcaldes de localidades como Cordovilla o Villoruela, que a pesar de incluirse dentro del radio de acción de este dispositivo, llevan ya varios años sin tener temporeros. Ambas localidades integran este protocolo de actuación junto a Calvarrasa de Abajo, Encinas de Abajo, Huerta, San Morales, Babilafuente, Villoria, Moríñigo y Machacón.

Los profesionales de los Centro de Acción Social (CEAS) se desplazan a los municipios cuando se detecta una situación de necesidad o un asentamiento al aire libre, algo de lo que informan los ayuntamientos y las parroquias. En los últimos años, se ha atendido a una media de 30 adultos y una decena de menor por año, aunque, como aseguran desde la Diputación, es complicado saber el número total de temporeros que acuden a Salamanca cada verano.

El dispositivo de este año comenzó el pasado 17 de junio con el envío de una carta a los ayuntamientos, así como al puesto de la Guardia Civil en Villoria y las parroquias de la zona.

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