Un año después, vuelve la rehabilitación de la Torre de los Anaya

Cuando el 4 de septiembre de 2018 se formalizó el primer contrato de rehabilitación de la Torre de los Anaya, la previsión era que diez meses después, en verano de 2019, el edificio histórico de la calle San Pablo estuviese listo para albergar el gran espacio cultural en el que el Ayuntamiento y la Diputación lo quieren convertir. Sin embargo, más de año después los trabajos continúan sin ejecutar después de que en dos ocasiones se haya tenido que resolver el contrato con las empresas encargadas de acometer las obras. En el primer caso, porque los trabajos no avanzaban, y en el segundo, porque la propia compañía renunció a seguir adelante con el proyecto justo al comienzo de la pandemia. Mañana lunes, según confirman fuentes de la Concejalía de Fomento y Patrimonio, se reactivarán los trabajos después de permanecer más de un año completamente parados. El reto, concluirlos en la primera mitad de 2021.

Tras la parálisis de la pandemia, el Consistorio volvió a licitar el contrato —ya no de forma íntegra, puesto que la primera adjudicataria acometió parte de los trabajos— y lo adjudicó a Cabero Edificaciones por 1.219.536 euros. La Concejalía de Fomento y Patrimonio ha tratado de agilizar los trámites todo lo posible para reemprender cuanto antes la intervención ya que ésta cuenta con 652.700 euros de fondos estatales, concedidos a través del programa del 1,5% Cultural de rehabilitación de patrimonio histórico. Los plazos fijados inicialmente para los proyectos que reciben esta subvencion del Ministerio de Fomento ya han vencido, pero el Consistorio está negociando una prórroga alegando que los retrasos se han debido a problemas sobrevenidos con las adjudicatarias.

En estos dos años desde que comenzaron por primera vez las obras en el edificio nobiliario, a los usos previstos para el inmueble se ha sumado uno nuevo. El Ayuntamiento quiere ubicar en él un centro de interpretación del proyecto Life “Vía de la Plata”. La rehabilitación persigue la reconstrucción y consolidación de la fachada exterior de la antigua casa de los Anaya y Bazán, edificio histórico protegido por el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), y en la adaptación de su interior para, además de hacerlo más accesible —incluye la instalación de un ascensor—, albergar exposiciones, conciertos, cursos, presentaciones de publicaciones e incluso una ludoteca infantil y liberar así de actividades al teatro Liceo.

Temas

• Salamanca
• Obras