Víctor Rodríguez (COPASA): “Nuestra misión es alimentar a la sociedad desde el medio rural”

Siete décadas de trabajo y profesionalidad avalan la trayectoria de COPASA, que hoy puede presumir de ser una de las cooperativas más fuertes de Castilla y León. Un crecimiento ordenado y el impulso de nuevas actividades y servicios, siempre pensando en sus socios, marcan un futuro que miran con optimismo.

La situación del campo es especialmente compleja en este momento, ¿qué necesita el sector para poder seguir adelante?

Sí, vivimos desde finales de 2020 una escalada de costes que afecta de lleno a la viabilidad de las explotaciones agrícolas y ganaderas; primero fueron las materias primas, luego las energías, los combustibles, etc, etc, de manera que se fue produciendo un desfase ingresos/gastos que para el ganadero supuso entrar en pérdidas. Todo se agravó tremendamente con el inicio de la guerra de Ucrania, y aunque los precios que el ganadero percibe por sus producciones han ido subiendo, el panorama es muy comprometido, al punto de estar provocando una reducción de censos de animales en producción, que puede ocasionar un encarecimiento aún mayor de la cesta de la compra, incluso puede existir riesgo de desabastecimiento de algunos alimentos, de continuar esta situación.

A todos los problemas que sufre el campo en este momento se suma el intento de “criminalizar” a los agricultores y ganaderos desde diferentes sectores. ¿A qué cree que se deben estos ataques?

Interesante reflexión, porque en los últimos años las corrientes para culpar a agricultores y sobre todo a los ganaderos se han visto alentadas por diversos colectivos que se dicen ecologistas, progresistas, animalistas, incluso por miembros del Gobierno de España, denotando su ignorancia sobre este sector, siendo su vida absolutamente urbanita, y dejándose manipular por un “buenismo” vacío de contenido, absurdo y alejado de la realidad que vivimos. El agricultor y ganadero produce alimentos de calidad, ricos, sanos, y es respetuoso con las normas ambientales y de bienestar animal, que son muy exigentes en Europa. Esta es la realidad en nuestro día a día, y tristemente el sector se ve vilipendiado injustamente y de forma irresponsable por una pequeña parte de la sociedad, y por nuestro gobierno. Es una pena, porque se penaliza el desarrollo ordenado y la factura la tendremos que pagar todos.

Siempre se ha mostrado muy crítico con la lentitud de las administraciones para autorizar proyectos, ¿se ha mejorado algo en los últimos años?

Lamentablemente la lentitud es una característica inherente a nuestras administraciones, algo que se ha cronificado, y que las autoridades consienten, esto se traduce para el emprendedor, para las empresas, para la economía activa y generadora de recursos y empleo en un lastre difícilmente justificable. Esta ineficiencia no sería admisible en la empresa.

La nueva PAC sigue generando muchas dudas entre los productores, ¿cómo cree que afectarán las nuevas exigencias europeas al campo salmantino?

Creo que la nueva PAC se aleja más de la realidad que vivimos; cada nueva reforma resulta más compleja, más difícil de entender aplicando simplemente el sentido común... es muy preocupante que los representantes que tenemos en Bruselas, que deberían ser coherentes con la realidad que nos toca, que tenían que velar por una soberanía alimentaria que es el origen de la propia PAC, se muestren cada vez más alejados de la sociedad, incapaces de reaccionar ante las circunstancias actuales. Es necesario estimular la producción, preservando el medio, y ello es posible, no es algo incompatible.

COPASA celebró en 2021 su 70 aniversario, ¿qué balance hace?

Es un balance cargado de agradecimiento a los que nos precedieron, que sembraron con su trabajo el bienestar del que hoy disfrutamos. Muy positivo, de importante crecimiento, que merced al trabajo de los socios, y de los Consejos Rectores que han dirigido la cooperativa en todos estos años se manifiesta año a año en un aumento consolidado de la actividad, de los servicios que COPASA ofrece, de los nuevos proyectos, y de la solvencia como empresa. Ello nos permite mirar al futuro con optimismo a pesar de la incertidumbre del momento.

¿En qué proyectos de innovación está trabajando en este momento COPASA?

Conjuntamente con otras empresas del sector, y el ITACyL, en un proyecto de desarrollo de cultivos forrajeros adaptados a nuestro clima y a nuestro suelo. Este mismo año, además hemos sellado un acuerdo con dos importantes empresas de la producción del ibérico y del campo de la alimentación animal, para acoger diversos proyectos de I+D en el campo del porcino ibérico, al que denominamos iBENUCOP, y que está dando sus primeros pasos para contribuir al desarrollo tecnológico del sector.

¿Qué retos de futuro se plantea la cooperativa?

Son diversos, y se han plasmado en el Plan Estratégico que la Asamblea de COPASA, S. Coop. aprobó en 2021, que consisten en un crecimiento ordenado, en el impulso de nuevas actividades y servicios, siempre orientadas al socio agricultor y ganadero, y para contribuir al desarrollo y bienestar de la sociedad en la que estamos; no en vano nuestra misión es “Alimentar a la sociedad desde el medio rural”, y nuestro lema es “Alimentar el futuro...”

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