Cuando Hawking condujo por la Rúa

"Este hombre un día se mata. Le encanta correr". Con estas palabras, Jane Wilde, la primera esposa de Stephen Hawking, justificaba el paseo acelerado que el físico protagonizó en su silla de ruedas por la Rúa Mayor salmantina. Era octubre de 1987 y el testigo de esta escena fue Jesús Martín, catedrático de Física Teórica de la Universidad de Salamanca y la persona que consiguió que Hawking —que este miércoles murió a los 76 años— visitara la capital charra.El 5 de octubre de 1987 el Paraninfo de la Universidad se quedó pequeño para acoger una conferencia de Stephen Hawking titulada "La flecha del tiempo". LA GACETA tituló al día siguiente la información con una de sus afirmaciones: "El universo no es una estructura estática". Tres décadas después de aquel acontecimiento, Jesús Martín recuerda cómo se gestó aquella visita. "Gracias a un amigo de Bilbao, Alberto Chamorro, que tenía contacto con su entorno, conseguí ponerme en contacto con Jane, por entonces esposa de Hawking. Aún conservo las cartas de aquellas gestiones", asegura.