Identificados los 30 radares móviles que la DGT instalará en Salamanca

En la línea de reducir el número de accidentes en las carreteras secundarias, la Dirección General de Tráfico publicó ayer 30 tramos de carreteras secundarias en la provincia de Salamanca (1.500 en el conjunto del país) en los que se intensificará la vigilancia de la velocidad con radares móviles. Más que localizaciones exactas, el listado que dió a conocer ayer la DGT establece un amplio margen de tramos que califican de peligrosos. Como ejemplo, un conductor podría encontrarse con un dispositivo de vigilancia en los 114 kilómetros que separan Doñinos de Salamanca de la Fregeneda a través de la CL-517. Los dispositivos se colocarán de forma visible para que su presencia sirva como medida de disuasión y prevención con el objetivo de que se respeten los límites de velocidad. "La denuncia no es el objetivo final", señaña el departamento que dirige María Seguí. A la hora de identificar los tramos, Tráfico ha tenido en cuenta el número de accidentes graves, con víctimas mortales o heridos que necesitaron hospitalización; el número de siniestros en general y la información de la velocidad media de circulación registrada en este tipo de carreteras secundarias. La DGT ha puesto especial énfasis en controlar la velocidad en las carreteras secundarias ya que es uno de los componentes fundamentales que determina la mayor o menor incidencia en la siniestralidad vial, gravedad y el grado de lesión de las víctimas, en caso de accidente. Los datos de Tráfico señalan que cerca de 900 personas fallecieron el año pasado en este tipo de vías. En esta línea, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil dedicarán como norma general el 80% del tiempo de sus jornadas a tareas en carreteras convencionales. Los límites de velocidad genéricos en vías convencionales es de 100 kilómetros por hora si existe un arcén de al menos 1,5 metros y de 90 kilómetros si el arcén es más reducido. Los agentes denunciarán a los conductores que superen en 8 kilómetros por hora la limitación de la velocidad desde los 30 a los 90 kilómetros. En el caso del límite de los 100, el radar saltará a los 109 km/h; con 110 a los 120 km/h y con 120 a los 131 km/h. A partir de superar la velocidad indicada en cada tramo independientemente de la zona geográfica, el conductor podrá ser denunciado.