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Viernes, 18 de noviembre 2011, 14:43
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Lo que empezó siendo una manifestación contra los recortes educativos convocada por el movimiento 15M y secundada por CEA (Colectivo Estudiantil Alternativo) acabó conviertiéndose en un encierro ilegal de más de medio centenar de jóvenes en la facultad de Geografía e Historia, encierro del que se desvincula CEA. La manifestación, que había partido desde la Plaza Mayor bajo el lema "La Educación no se vende, se defiende", debía haber finalizado frente a la fachada de la Universidad de Salamanca. Sin embargo, un numeroso grupo de "indignados" optó por continuar las protestas en el centro universitario "para demostrar que la universidad nos pertenece a todos", como aseguraron.Antes de abandonar el Patio de Escuelas dos jóvenes manifestantes se subieron a la estatua de Fray Luis de León para envolverla por completo con un plástico negro como símbolo de su rechazo a la actual situación universitaria.Ya en la facultad, y sin vigilancia policial, los jóvenes utilizaron los bancos de madera y varios sillones para levantar una pequeña barricada junto a una de las puertas de entrada. Obstáculo que tuvieron que sortear muchos de los docentes que a esa hora permanecían trabajando en el centro universitario.La presencia de un redactor y un fotógrafo de este medio de comunicación empezó a molestar a los "indignados" allí concentrados, que llegaron incluso a amenazarles por estar realizando su trabajando y a tomarles fotografías con sus teléfonos móviles.Pasadas las nueve de la noche, hora de cierre de la facultad, medio centenar de jóvenes decidió pasar la noche en el centro donde celebraron una asamblea para decidir las próximas actuaciones. Encierro consentido por la UniversidadTras el encierro, la vicerrectora de Estudiantes, Cristina Pita, explicó que desde la Universidad habían decidido no desalojar a los estudiantes y consentir la celebración de su asamblea y su encierro, siempre que se comportasen con respeto. Además, señaló que en todo momento un vigilante iba a controlar la situación, aunque Pita se mostró convencida de que este movimiento solo busca notoriedad y que no habría incidentes.A las 9 de la mañana, la concentración se disolvió.
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