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Bienvenidos a la casta

Bienvenidos a la casta

Susana Magdaleno

Viernes, 11 de agosto 2017, 06:45

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Cuando García-Page hacía campaña en Salamanca para Pedro Sánchez en el 2015 defendía que era necesaria su llegada al Gobierno por la bisoñez de otros partidos que querían gobernar sin haber tenido un solo diputado. Ahora Podemos, contra el que arremetía, no sólo tiene diputados sino que gracias a él, consagrado veleta, también tendrá experiencia de Gobierno.García-Page no sólo apoyó ese diciembre en Salamanca a Pedro Sánchez, sino que incluso se partió la cara por él porque le consideraba víctima de una dura campaña en la que le habían "rastreado" por todos los lados, decía, y sólo habían encontrado "dos metros de candidato". Meses después fue en cambio él quien rastreó hasta la extenuación al que había sido su perfil ideal y regaló su apoyo a Susana Díaz, después de calibrarse como candidato y acabar tirando la toalla. El presidente de Castilla- La Mancha por pactos, que no por votos, no estaba entonces a favor de regalarle el mando a Podemos, justo lo que él acaba de hacer.A media partida, cuando los apoyos de Pedro Sánchez crecían y Susana Díaz se iba convirtiendo en un estorbo, García-Page optó por el silencio y comenzó entonces a situarse de perfil para girarse a derecha o a izquierda en función de quién ganara.Ganó Pedro Sánchez, se quejó amargamente de que el triunfal secretario general no le hablara, y transcurrido un tiempo prudencial y viendo que la dirección nacional ya tenía preparado a su sustituto, se giró a la izquierda, abrazó a Podemos y acaba de convertir a Castilla- La Mancha, como bien dijo ayer Echenique, en el laboratorio para desbancar a Rajoy. El veleta, de momento, se ha detenido. Ahora aprobará por fin los presupuestos de Castilla-La Mancha y ese gesto le mantendrá en su sillón, porque el desbloqueo de su Gobierno le reconcilia definitivamente con su jefe. Decían que uno de los lastres de Susana Díaz era la ambigüedad de García-Page, amigo de Podemos en su Comunidad y a la vez enemigo de que entrara en el Gobierno central, y esta maniobra le ha delatado.Lea el artículo completo en la edición impresa de LA GACETA en Orbyt y Kiosko y más

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