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Los alumnos de la Escuela Taurina ya levantan pasiones

Claudia Gutiérrez, Manuel Tabernero e Ismael Martín se ´llevan´ un tentadero en el que tomaron partida 14 alumnos y que vivió su particular estirón tras cuatro ediciones: se sumó el caballo de picar

I.R.M.

Sábado, 9 de septiembre 2017, 12:17

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La Escuela de Salamanca mostró este viernes su nivel advanced -intermedio- en La Glorieta. El caballo de picar y la puya de tienta incorporados. Las sorpresas escalaron por los tendidos al margen de la estatura y la edad. "Hablar con la espada y la muleta", que dicen los toreros. Pablo Jaramillo como muestra del ´estirón´. Del traje corto en terciopelo verde a la calzona larga. La seriedad. Ya no necesita asomarse por la tronera del burladero para ver cómo es la vaca.Diez minutos antes de que el desenjaule abriera la Feria, el patio de cuadrillas los apretones de manos pasaban lista entre los alumnos de la Escuela. "¡Ya estamos los catorce!", gritó una voz en la salita en la que se ajustaban los fajines. Miraban fotos a la vez. "Mira a Del Álamo...", indicaba Manuel Tabernero a Alberto Muñoz como para paliar los nervios. Estiramientos de dedos. Un natural suelto e imaginario. Quedaban dos horas para hacer el paseíllo.A diez minutos del paseíllo el túnel del patio de caballos se pobló de capotes y muletas. El profesor José Ramón Martín puso orden en mitad del revuelo. Todos en torno a su figura. Como un míster de fútbol base. La arenga al estilo Héctor Cúper. Devoraron el paseíllo. El caballo secundaba los pasos de la chavalería. La primera vaca —la única negra del cuarteto— exhibía afiladas defensas. Delanteras, además. La nota de corte sobre la mesa. Y Claudia Gutiérrez deletreó el nivel advanced a la verónica. Sin enmendarse. Ganando terreno. Los tendidos exultantes. Un encuentro con el caballo dejó el examen de bravura visto para sentencia. No había más. Tocaba bregar. Y allí creció la figura de Manuel Tabernero. Una carrera de espaldas tras el cite y la vaca corrida a los vuelos. Luego, la quietud. La mano diestra para tapar las huidas. Los remates amarrados a la cadera tuvieron sabor y hasta cierta intimidad: sonó un "¡ea!" y ligó el pase de pecho. Primer envite del tentadero superado con nota. Una ovación ensordecedora se apoderó de La Glorieta a la hora de enchiquerar a la erala. La lección de brega aprendida y demostrada: el capotazo en corto para aferrarse al pitón. Los 14 alumnos como los forcados tras una pega. Vaca al corral.Luego se produjo en desfile de becerras jaboneras. Pablo Muñoz lanceó en un palmo de terreno. Como el llorado Fandiño con aquél lisardón de Adelaida Rodríguez en 2012. Luego encadenó una chicuelina y la media. El brindis entonó el "feliz cumpleaños". La vaca tuvo correa para Muñoz y tres alumnos más. Pablo Jaramillo es ´zurdo´ Y también advanced. ´Pasó´ de la mano diestra. Sin la ayuda primero fijó, luego ligó y ya en la tercera serie de naturales bajó. El tentadero ya había superado su ecuador. El nivel se mantenía. En todas sus vertientes, Antonio Zurdo lanceó de rodillas: la larga, los faroles, las verónicas pereristas y el remate atropellado. La última becerra generó una ´pelea´ de terrenos entre compañeros: del 7 -sombra- al 3. Ismael Martín salió por la tangente. Los medios y la mano derecha. El murmullo de La Glorieta al reencontrase con él. Tres verónicas sueltas y una media erguida y de manos altos elevó dos puntos el runrún. Esteban Tabernero simuló la muerte de la becerra y el tentadero llegó a su fin. Una calurosa y cerrada ovación sirvió de puerta grande a modo de nota final: nivel advanced logrado en público.

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