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Debut rotundo y triunfal de Diego Ventura en La Glorieta

Cortó cuatro orejas para salir por la puerta grande | Oreja para Andy Cartagena en el primero de la tarde | Sergio Galán, discreto

Sábado, 6 de agosto 2016, 12:27

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Primer toro. Faena animosa ante un toro noble y templado. Aunque el toro estaba muy mermado por los rejones de castigo. Destacó en banderillas y colocó un gran par al violín con las cortas. Mató de un rejonazo certero. Una oreja.Segundo toro. Faena aseada a la que la ha faltado transmisión. El toro fue noble pero le faltó emotividad, aunque Sergio Galán le castigó poco de salida. Tras una faena fría, colocó un pinchazo y un rejonazo efectivo que acabó con la vida del toro de Passanha. Ovación.Tercer toro. Faena muy intensa que ha hecho vibrar al público de La Glorieta. Con los caballos 'Oro' y 'Remate' la gran actuación de Ventura alcanzó una gran intensidad y se ganó al público con adornos de gran belleza. Mató de un rejonazo trasero y cortó dos orejas al toro de su debut en La Glorieta.Cuarto toro. La labor de Andy Cartagena estuvo condicionada por el nulo juego del toro, que se rajó muy pronto y lastró la actuación de Cartagena, que tiró de voluntad para tratar de agradar al público. Mató de estocada certera, aunque precisó de un descabello. Se le pidió la oreja pero finalmente dio una vuelta al ruedo. Quinto toro. Sergio Galán estuvo muy dispuesto durante toda la faena, aunque con un toro que manseó de salida y al que se le acabó pronto el fuelle. El toro llegó muy parado al último tercio y eso provocó que Galán estuviera fallón con el rejón de muerte. Recibió una cariñosa ovación. Sexto toro. Diego Ventura cortó las dos orejas al sexto tras una vibrante y emotiva fanea por la que le llegaron a pedir con intensidad el rabo, que el presidente, sin embargo, no concedió. Fue una faena completa y variada que comenzó con la suerte de la garrocha y siguió con comprometidos y ajustados quiebros en banderillas, ceñidos al final con las rosas. Rejonazo certero para acabar con su oponente. Dos orejas.

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